La iniciativa de reducir a cinco días de trabajo por dos de descanso a la semana tendría un efecto positivo para los trabajadores, ya que además de brindar la posibilidad de tener mayor tiempo con sus familias obligaría a los patrones a nuevas contrataciones, declaró el abogado Manuel Fuentes Muñiz, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Una jornada de 40 horas a la semana será adecuada para las personas y sus condiciones de salud, pues en promedio 425 mil trabajadores sufren accidentes relacionados con su función al año, por lo que una reducción significaría una disminución de este tipo de percances, reconoció.
En entrevista, el académico del Departamento de Derecho de la Unidad Azcapotzalco ubicó la existencia de dificultades legislativas para la aprobación de esa iniciativa, debido a que se requiere una reforma al artículo 123 de la Constitución, que establece que por cada seis laborales debe haber una de descanso.
Modificar la Carta Magna
La modificación no es sencilla, porque el artículo 135 establece que debe haber una mayoría calificada de dos terceras partes del Congreso de la Unión para poder dar luz verde a la modificación a la Carta Magna.
Además de esa primera fase, “más de 50 por ciento de las legislaturas estatales tendría que aprobar la reforma, asunto complicado que, a pesar de haberse aceptado en la comisión respectiva, aún deberá regresar al pleno de la Cámara”, indicó el jurista.
Una segunda cuestión a considerar es que desde que se instauró el artículo 123 constitucional quedó establecida la premisa actual de 48 horas por semana.