Maestros y directores de educación básica han criticado el regreso a clases en semáforo amarillo y la propuesta para implementar Centros Comunitarios de Aprendizaje (CCA).
Centros Comunitarios de Aprendizaje
Maestros indicaron que sería muy complejo para los padres de familia llevar a sus hijos sólo a sesiones de 45 minutos, y “no se considera cuáles serían los riesgos para la escuela si se da un solo caso positivo.
Tampoco se establece en la propuesta lanzada por la Secretaría de Educación Pública (SEP) de dónde saldrán los recursos para la limpieza y sanitización de las escuelas, pues no están dadas las condiciones materiales ni técnicas.
Dirigentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) señalaron que la “determinación del magisterio disidente es que no habrá regreso a clases si no están dadas las condiciones mínimas de seguridad sanitaria para toda la comunidad escolar, lo que incluye a niños, maestros y padres de familia”.
También señalan que supuestamente la creación de los Centros Comunitarios de Aprendizaje tiene una base legal en el artículo 14 de la Ley General de Educación, donde efectivamente se establece que se concibe a la escuela como un centro de aprendizaje comunitario en el que se construyen saberes, pero esto no da un sustento sólido para proponer que se abran CCA en medio de una pandemia.
Otros maestros indican que con esta medida, la Secretaría de Educación Pública (SEP) cede ante las presiones de grupos empresariales, particularmente de Fundación Azteca, e incluso se toman los mismos modelos para legitimar sus acciones.
Además, denuncian que los maestros han demandado que la atención a las medidas socioemocionales debían ser las prioritarias desde el inicio de la pandemia, y no el cumplimiento de planes y programas de estudio como demandó la SEP.
Cabe destacar que no todas las escuelas cuentan con acceso a agua potable, baños y energía eléctrica, estos servicios son indispensables para asegurar las medidas sanitarias.