La UNESCO celebró una conferencia para el tercer Día Internacional de la Educación el 25 de enero con el tema «Recuperar y revitalizar la educación para la generación COVID-19». La pandemia ha amplificado las desigualdades sociales, económicas y digitales. Pero también ha habido innumerables historias inspiradoras de innovación de todo el mundo que han hecho posible que los alumnos accedan a la educación en diversas circunstancias.
Colombia y el Caribe
Haciendo hincapié en un enfoque nacional en la equidad, María Victoria Angulo González, Ministra de Educación de Colombia, describió el uso de diversas plataformas desde internet hasta teléfonos móviles para asegurar la continuidad del aprendizaje, junto con programas de alimentación a domicilio y apoyo económico a las familias. El desafío ahora es reactivar los sistemas educativos e identificar brechas de aprendizaje, con modalidades mixtas como solución intermedia.
Oleg Figlin, vicepresidente de Blackboard para Europa, Oriente Medio y África, hizo oír la voz del sector privado de la Coalición Mundial por la Educación, y describió la colaboración para ampliar la educación digital para docentes en el Caribe, prestando especial atención a la preparación de formadores de formadores, curso de desarrollo materiales y comunidades de práctica. “El aprendizaje combinado no es una opción, es una obligación”, afirmó.
«El aprendizaje no tiene por qué suceder solo en el aula»
Ranjitsinh Disale, ganador del Global Teacher Prize, vio un cambio positivo en la adopción de la tecnología por parte de los profesores. “Cuando dictas clases en línea, no puedes seguir la forma tradicional de enseñar. Se necesita más aprendizaje basado en proyectos”, dijo, y también enfatizó la necesidad de desarrollar la creatividad y las habilidades de pensamiento crítico, y “asegurarse de que todos los estudiantes estén aprendiendo”.
Otto Arindam, fundador de Slum2School en Nigeria, compartió su historia sobre cómo está aprovechando la conectividad para llevar el aprendizaje a los niños en situaciones vulnerables. “Para nosotros era importante asegurarnos de que los niños todavía estuvieran aprendiendo: pudimos conectar a más de 1000 estudiantes en todo el continente”, dijo. “El aprendizaje no tiene por qué suceder solo en el aula. Queremos escalar nuestros programas de aprendizaje remoto y expandir la conectividad». Estos son solo algunos de los ejemplos de la innovación en la educación.