El heno de chía podría ser una opción para alimentar y, quizá, disminuir el tiempo de engorda de conejos debido a su nivel de proteína que compite con el de la alfalfa, además del ciclo corto de cosecha, poco requerimiento de agua y largo tiempo de almacenaje.
Expertos de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán, de la UNAM, encabezados por José Luis Sánchez Millán, académico de la entidad universitaria, desarrollan el proyecto.
De acuerdo con los análisis químicos proximales realizados a la planta herbácea –determinación de porcentajes de proteína humedad, grasa, fibra, cenizas y carbohidratos solubles– representa una opción forrajera, apuntó Sánchez Millán.
Ciclo
Su ciclo de cosecha es de 72 días y podría ser solo de temporal, mientras que la alfalfa, considerada “la reina de los forrajes”, requiere demasiada agua para obtener sus cualidades nutricionales. Hoy en día, con las condiciones de sequía y el registro de altas temperaturas, no podemos darnos el lujo de pensar en producir los cultivos forrajeros que demandan grandes cantidades del vital líquido para su cultivo, aseveró.
Desde esa óptica, indicó el ingeniero agrícola, estamos en posibilidad de contar con una nueva opción forrajera con mínimos requerimientos hídricos, un nivel importante de proteína, poco tiempo relativo de producción y la posible presencia de ácidos grasos poliinsaturados en la carne de conejos alimentados con este producto el cual podría estar a la altura o superar nutricionalmente al alimento comercial.
Según el experto, el forraje obtenido en la FES Cuautitlán será transformado en pellets (pequeños trozos de alimento prensado), tratando de igualar al alimento comercial. Una vez obtenido se aplicará el estudio en ejemplares producidos en el Módulo de Cunicultura del Centro de Enseñanza Agropecuaria (CEA) de la Facultad.